Ejecutas crecientes en Irán: los expertos de la UNO expresan preocupación
Ejecutas crecientes en Irán: los expertos de la UNO expresan preocupación
En Irán, la ejecución de sentencias de muerte ha logrado dimensiones alarmantes este año. Se han ejecutado más de 400 personas desde el comienzo de 2024, incluidas 15 mujeres. Este preocupante número fue publicado el lunes 2 de septiembre por expertos de las Naciones Unidas. Los expertos que trabajan en nombre del Consejo de Derechos Humanos de la ONU fueron particularmente críticos con el aumento drástico en las ejecuciones en el último mes, agosto.
En agosto, al menos 81 personas fueron ejecutadas, lo que corresponde a casi duplicar las 45 ejecuciones en julio. Esta es una señal de que aumenta la aplicación de la pena de muerte en Irán, independientemente de las normas internacionales. Los expertos confían en su propia investigación independiente, pero sin especificar fuentes precisas.
Aumente las ejecuciones y la preocupación internacional
de las más de 400 ejecuciones este año alrededor de 41 personas interesadas en relación con las drogas. Este número plantea preguntas, ya que el pacto internacional sobre burgueses y los derechos políticos a los que pertenece Irán, la aplicación de la pena de muerte solo permite "los crímenes más graves", como asesinato. Se dice que la ONU solicitó repetidamente una moratoria a las ejecuciones para finalmente abolir la pena de muerte.
Los expertos en la ONU han encontrado que el número de ejecuciones debidas a delitos de drogas en Irán ha aumentado significativamente desde 2021, aunque el gobierno ha tratado de reformar las leyes para restringir la aplicación de la pena de muerte en tales casos. Esta mayor actividad podría considerarse como un instrumento de intimidación controlado por el estado.
Otro aspecto importante es la posible motivación política detrás de las ejecuciones. Los activistas de los derechos humanos acusan al régimen iraní de usar la pena de muerte como una presión contra la protesta, en particular desde la muerte de Mahsa Amini, un Kurdin de 22 años que fue arrestado debido a una violación del estricto régimen de ropa iraní. Su trágica muerte ha provocado protestas a nivel nacional y el gobierno se ve obligado a pasar frente a estos disturbios.
Un ejemplo aterrador de las implicaciones políticas de las ejecuciones es el caso de Reza Rasaei, un manifestante kurdo que fue ejecutado el 6 de agosto en el sistema penitenciario de Dizel Abad. Según los informes, sus confesiones se obtuvieron bajo tortura, y las acusaciones de que había matado a un miembro de los guardias revolucionarios fueron revocadas más tarde por Co -Accused. Sin embargo, la corte iraní más alta confirmó su pena de muerte. Estos incidentes plantean serias preguntas sobre la equidad y la transparencia de la jurisprudencia en Irán.