Indignación sobre la ceremonia de apertura: el último sacramento se burló
Indignación sobre la ceremonia de apertura: el último sacramento se burló
CRÍTICA DE LA CEREMONIA DE APERTURA DE LOS JUEGOS OLÍMPICOS EN PARÍS
La ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de 2024 en París, que tuvo lugar el 26 de julio de 2024, causó indignación en todo el mundo. En una escena que fue diseñada como una nueva interpretación del último sacramento, Drag Queens tenía el papel de los apóstoles y un DJ con sobrepeso. Jesús representado. Esta actuación, que fue parte de un espectáculo de 1.500 millones de euros, fue considerado por muchos como irrespetuoso hacia el cristianismo.
Las reacciones de los obispos de todo el mundo
Como resultado de estas controversias, los obispos de diferentes partes del mundo de la conferencia de obispos franceses y los obispos estadounidenses se unieron para expresar su indignación por la escena mostrada en la ceremonia. En una declaración publicada el 27 de julio, los obispos franceses expresaron su profundo arrepentimiento por el "aspecto de la burla del cristianismo". Agradecieron a otras comunidades religiosas que habían expresado su solidaridad.- El arzobispo Charles Scicluna von Malta expresó su "dolor del insulto a los cristianos" y alentó a otros a levantar la voz.
- El obispo Andrew Cozzen de los Estados Unidos pidió a los católicos que rezaran y rápidamente reaccionen a la acción.
- El obispo Stefan Oster de Alemania calificó la actuación en un "punto bajo" y superfluo.
Una discusión social más amplia
Este evento plantea preguntas sobre los límites del arte y la sátira. Las revisiones incluyen que la "tolerancia" a menudo se usa en nuestra sociedad, mientras que las creencias religiosas no experimentan el mismo respeto. El arzobispo de Santiago de Chile, Fernando Chomali, describió la presentación como una parodia grotesca del sacramento de la Eucaristía y lo llamó una expresión de nihilismo que no conoce límites.
Una dimensión política
El incidente también hizo olas políticas. Marion Maréchal, un político francés, se volvió hacia los cristianos que se sintieron insultados por la actuación y enfatizó que esto no representaba a la verdadera Francia, sino más bien una minoría provocativa. Javier Tebas Medrano, presidente de La Liga, también dejó en claro y calificó el uso del último sacramento en los Juegos Olímpicos inaceptables e irrespetuosos.
Un llamado a la unidad en la comunidad Faith
En el medio de los controvertidos líderes religiosos llamó a sus comunidades a la unidad. Hicieron hincapié en la importancia de reaccionar a tales eventos a través de la oración y las acciones positivas. Los obispos enfatizaron que la celebración olímpica va más allá de las preferencias ideológicas de los artistas individuales y esperaba que los fieles se unieran durante este tiempo.
En vista de la ola de indignación, queda por ver en vista de las consecuencias a largo plazo de esta actuación para el diálogo entre religión y arte. Queda claro que la inspiración y la creencia deben permanecer entrelazadas en tiempos de duda.- nag